¿Cómo hacer para no quererlo?
Talentoso hasta la médula. Callado. Sumiso. Con vetas oscuras pero una mirada
que refleja años en algún rincón pensando, meditando, queriendo cambiar el
mundo…
Seguramente, quien lea estas
primeras líneas pensará que están dedicadas al Caballero Oscuro.
No…
El destinatario de tantos halagos
no es otro que Nolan, Christopher Nolan. Me atrevo a decir EL mejor director
inglés de los últimos tiempos, de la última década. El hombre que esta vez se
ha puesto a sus espaldas una historia que en el cine ha traído más parodias y
desencantos que aplausos. Ha cargado con una trilogía y lo ha hecho con estilo
y pasión. Pasión, acaso EL elemento fundamental de aquellos que crean, los
llamados artistas (ni profesión, ni ocupación…estilo de vida).
Mago de las imágenes, genio
narrativo, hombre apasionado por comunicar su conflicto constante con la mente y
esa oscuridad que la habita. Nolan, desde siempre, ha querido usar el cine como
sala de diván, como espacio de tratamiento de las problemáticas que nos
atraviesan a todos, porque, hay que decirlo, somos parte de su mundo. Los
sueños, el insomnio, la memoria, la demencia y sus derivados, la neurosis y sus
derivados, la vida que trata de esquivar todos estos sustantivos abstractos, la
noche que les da vida, y por sobre todas las cosas, sobrevolando, siempre ahí,
testigo: LA CULPA.
Memento, Noches Blancas,
Inception, Batman Inicia, El Caballero Oscuro y El Caballero Oscuro Asciende, un film
tras otro ha ido involucrándonos perfecta y sensorialmente en esta galaxia
nolaniana de la que es imposible querer salir (a menos que uno se esté haciendo
mucho pis y deba interrumpir la hipnosis je).
En realidad, ésta debía ser una
review del último film del director, pero se convirtió en otra cosa…suele
suceder, ya ha pasado otras veces, un pequeño devenir. Pido disculpas. Cuando me contagian la pasión me
dejo llevar.
The Dark Knight Rises, la última parte de la trilogía, nos ubica ocho años después, con una ciudad Gótica en aparente paz, un
comisario Gordon que gracias a la Ley Dent ha erradicado la violencia (pero se
sigue sintiendo culpable por el encubrimiento de los crímenes de Harvey) y un
Batman desaparecido, al igual que Bruce Wayne, quien se encuentra oculto en su
mansión. Pero las cosas irán poniéndose en movimiento cuando el hombre de la
espalda ancha (Bane para los amigos), aparezca para cumplir con los deseos de
la Liga de las Sombras y sus muchachos; las cosas irán complicándose, obligando
al hombre murciélago a sacar el traje y ponerse en forma. En su camino se
cruzará con la misteriosa Miranda Tate y con Selina Kyle, dos mujeres con iguales
dosis de belleza y misterio (y no cuento más porque voy a spoilear).
Creo que dije que Nolan era un
apasionado ¿no? Bueno, lo reafirmo. El hombre este logra que uno no se despegue
en ningún momento de la pantalla, metiéndonos literalmente en la fría Gotham
City, escapando de la police entre destellos y chispazos, volando en una
especie de batinave (que seguramente la gente no humana de Skynet le mandó desde
el futuro al hombre murciélago), corriendo entre la multitud, asfixiándonos en
los túneles subterráneos, temiendo al gordo-post corticoide Bane (que en el
fondo es sólo un hombre sensible), dejándonos con un final..¿excitante sería la palabra?.
¿Qué más decir? Si dijera que la
película no da respiro, que la música acompaña y nos corta la respiración, que
los actores son geniales (Nolan tiene sus actores fetiches) y uno se queda
esa cantidad de tiempo sin pensar en lo que ocurre fuera de la sala, estaría
dando información casi redundante…(aunque me veo obligada a aportar que amo a Michael "Alfred" Caine y si pudiera lo contrataría de amo de llaves, que desde que vi a Joseph Gordon- Levitt en la gran “10 cosas que odiode ti” supe que lo bancaría hasta la muerte, que Tom Hardy seguirá siendo mi
amor platónico de todos los tiempo –lo quiero!!! inflado, con barba, con acento
sureño, como venga!!!–, que Marion Cotillard es muy grossa y la Hathaway no decepciona,
que Bale es Bale y punto, y que el Sr. Gary Oldman está cada vez más hecho un
viejito tierno).
Aquél que haya visto algún film
de Nolan sabrá que esto ocurre (es decir, la respuesta al "¿qué decir?"). Quizás los fans del cómic puedan aportar más.
Quizás en algunos casos no se cumplan las expectativas. Ciertamente no es el
mío, así que la RECOMIENDO tanto como mirar una peli cualquier un día de lluvia
o comer una pizza con mucha muzzarella un domingo a la noche.
Cada vez que me siento frente a una peli de Christopher Nolan se cumple eso que decía Billy Wilder de que "si el Cine consigue que un individuo olvide por dos segundos que ha estacionado mal el coche, no ha pagado la factura del gas o ha tenido una discusión con su jefe, entonces el Cine ha alcanzado su objetivo".
GGss