Lo que queda del día...

El Sr. Stevens es el perfecto mayordomo inglés: servicial, parco, serio, eficiente; trabaja en Darlington Hall, la mansión de un aristócrata inglés que apoya al partido nazi. Stevens se enamorará de la señorita Kenton, ama de llaves del lugar, mucho más sensible y hasta cargosa (desde su punto de vista), pero no se animará a revelarle sus sentimientos hasta años más tarde, cuando pase la guerra y la mansión cambie de dueño.

Es a través de las cartas que ambos se mandan que la narración fluye a la perfección, brindando un hermoso film, un drama inglés con todas las letras, con grandes actuaciones y ese paisaje tan singular como cinéfilo. No en vano, este film tuvo 8 nominaciones al Oscar en 1994 y un tanto más a los Globos de Oro (incluso ganó el Bafta a Mejor Film).

Definición gaineteana: esas historias british entretienen y emocionan

Rescatable: Sir Anthony en su máximo esplendor (como verlo y no pensar que se va a devorar a alguien), Emma “nací para interpretar roles de época, me queda bien la ropa vieja” Thompson y hasta Christopher Reeve (esta fue una de sus últimas películas).
Olvidable: podríamos decir Hugh Grant, pero lo perdonamos (un año después saltaría a la fama con Cuatro bodas y un funeral)

@Eugess