Selección de capítulos
lunes, 30 de mayo de 2011
Quentin Tarantino presenta
domingo, 22 de mayo de 2011
un circo mediático
- Brean: What's the thing people remember about the Gulf War? A bomb falling down a chimney. Let me tell you something: I was in the building where we filmed that with a 10-inch model made out of Legos.- Motss: Is that true?- Brean: Who the hell's to say?
lunes, 16 de mayo de 2011
Hermanos y actores...
martes, 10 de mayo de 2011
Venecia/Génova
El cine es capaz de las cosas más impensadas. Por ejemplo, de elevar hasta el cielo un lugar o abandonarlo al rango de “un paisaje más”.
¿Qué intento decir con esto? Resulta que el otro día tuve la oportunidad de ver dos filmes casi en simultáneo. Dos filmes sobre ciudades italianas. Y cuando se trata de ese lugar europeo, me dispongo con todos los sentidos a experimentar lo que el celuloide me proponga (salvo con el caso del film ultra ganador de premios Gomorra que me aburrió). Dos films desarrollados en ciudades italianas pero dos maneras distintas de mostrarlas.
Fue entonces que al final, comprendí cuánto importa la historia. Cuánto pesa el buen argumento, que no por bueno debe pecar de complicado, al contrario, desde El Gabinete seguimos insistiendo que las mejores historias, son las más simples (El Gabinete no descubrió América, pero es importante resaltarlo cada tanto).
El primer caso: Venecia de la mano de El Turista (2010)
El film intenta ser un thriller, intenta ser glamoroso, intenta salir airoso poniendo a algún que otro actor destacado….intenta y se queda en el intento. Previsible por donde se lo mire, derrocha lugares comunes y termina dejando mal parada a la grandiosa Venecia.
Haber puesto a Angelina “no te aguanto” Jolie le resta puntos desde el vamos. Se hace la misteriosa y le sale mal, demostrando que si está en el mundo del cine, no es por talento seguro (es tan insulsa que por momentos da ganas de golpearla a ver si se despierta).
Lo de Johnny Deep no lo entiendo…sinceramente no lo entiendo. Suelo ver todos los films en los que está por mero fanatismo, pero esta vez parece haber sido contagiado con la estupidez actoral de Jolie. Paul Bettany por otra parte se amolda al saco acartonado, y lo demás son góndolas, mafiosos rusos y más góndolas.
Consejo: véanla y saquen sus propias conclusiones (el que tenga entrenamiento en estos tipos de “thriller” se dará cuenta desde el vamos quién es el verdadero Alexander Pierce).
El segundo caso: Génova de la mano de Génova (2008)
“Si te gusta la pasta y el helado te vas a sentir como en casa” Sandra
Este es un pequeño film. De corte independiente y dirigido por el inglés Michael Winterbottom, ha pasado desapercibido por el circuito. Pero siempre llega Cinemax para decir “no contaban con mi astucia” y compartirlo.
El film cuenta la historia de Joe, un profesor universitario interpretado por el gran y único Colin Firth, que al quedar viudo se muda con sus dos hijas Kelly y Mary a Génova, invitado por una amiga de sus épocas de Harvard, Sandra (Catherine Keener). Una vez instalado, Joe irá transitando los avatares de vivir en un país con otras costumbres, mientras deberá lidiar con el despertar sexual de la adolescente Kelly y los encuentros de la pequeña Mary con su madre muerta, además de sus propios sentimientos hacia su difunta esposa Marianne, hacia Sandra y hacia una alumna que le tira los galgos.
Todo endulzado con las callecitas angostas y medievales, las mil iglesias, la comida más perfectamente rica del mundo, la playa y ese punto perfecto en que las montañas se juntan con el mar. Esta historia resalta la ciudad, mostrando sus rincones más impensados, acompañando al propio espectador en ese viaje.
El final, con un montaje paralelo, terminará dándole el toque perfecto, como el bouquet de hierbas a la salsa bolognesa.
Consejo: el que conoce Italia se va a sentir como en casa (el que tenga padre o abuelos italianos aún más), pero sobretodo, el que guste de los pequeños filmes independientes adorará esta historia que no hace más que narrar un pequeño momento de la vida.
miércoles, 4 de mayo de 2011
que glorioso sentimiento...
martes, 3 de mayo de 2011
Podio: 3 formas de engañar ¿mediante el miedo?
Frozen (2010)
La primera impresión al ver el poster es de desolación. Una aerosilla sola, congelada y algo rota. La segunda impresión, la que llega al ver el film, sigue siendo de desolación, además de raciones de pánico, frío repentino y por momentos asquito.
¿Y el miedo? No es un film de terror ni en joda!
Devil (2010)
Llamada en nuestros pagos La reunión del diablo. Cinco personas quedan atrapadas en un ascensor de un edificio de oficinas de Filadelfia. No hay manera de rescatarlos y encima cada tanto sufren bajones de tensión que siempre se cobran alguna vida. Alguien más está con ellos en ese sucucho. ¿quién? ¿cuál de ellos estaría involucrado en una trama diabólica?
Esto es lo que intentará develar el detective Bowden desde afuera, controlándolos mediante la cámara del elevator, sumado a un suicidio misterioso y un guardia con cierto fanatismo religioso.
Sin embargo….¿y el miedo? Tampoco es un horror film ni por afano, en cambio sobresale un thriller que mantendrá en vilo hasta el final (hasta con el condimento del detective que sufre por un hecho triste en su pasado).
Consejo: para ver un sábado a la noche
The fourth kind (2009)
Acá el engaño está en la raíz misma del film. La estrategia de tratar la historia con fragmentos de videos caseros que mostrarían “lo real”, funciona, es efectiva. Es decir, un chasco pero que logra transmitir un literal “cagazo”.
Una psicóloga asegura haber sido abducida por habitantes de otro planeta, al tiempo que comienza a darse cuenta que sus pacientes están padeciendo situaciones similares.
Ocurrir en Nome, un pueblito de Alaska que parece estar siempre teñido de azul, le otorga un plus macabro que se completa con un suspenso logrado al no mostrar nunca nada de nada.
Consejo: de ser posible, verlo en compañía.
Bonus Track El resplandor (1980)
Aquí el único engaño sería el que se infligiría el propio espectador al seguir omitiendo ver este gran clásico. Kubrick es un maestro y nada más.
No muchos (quizás, sólo Roman Polansky) han tenido el talento de producir una tensión de tal magnitud en quien está del otro lado de la pantalla. Magnífica!
Consejo: VERLA!!!!